Cuidado En Lo Que Pides Que Te Lo Pueden Dar

Cumpliendo con mí deber de ciudadana fui al registro civil a registrarme valga la redundancia, ya que hace tres meses me encontraba indocumentada legalmente, mi carne vigente se me cayo en la disco y andaba mi único documento valido por decirlo así era mi credencial universitaria…luego de una larga jornada de espera y caras largas fui atendida, me sacan la fotito, preguntan mis datos y viene la gran pregunta día ERES DONANTE? Hace un tiempo ya me había hecho donante pero debo reconocer que se me paso por la cabeza arrepentirme, pero no, seguí fiel a mi dogma y dije si, lo soy, firmé el carne y me fui a casa con las palabras de mi padre en mi mente, esas palabras que me dijo cuando se entero que era donante…tu crees que en el caso, ni dios lo quiera, de que te pase algo, te van a salvar la vida?, además vas a parecer la hija de Frankestein, vas a ser un mapa relleno de valla saber uno que cosa…tu crees que si quedas en coma o en estado vegetal nos van a pedir la autorización correspondiente?, te van a desconectar sin preguntarle a nadie y ahí vas a quedar, con carga eléctrica por una hora tirada en pelota en una cama hedionda mas encima. A eso le discutí que cualquier persona que sepa lo que es realmente la vida sabe que quedar en estado vegetal no es vida, es sobrevida y nadie quiere eso, que en el peor de los casos preferiría morir ante quedar como una planta.
Deje pasar una rato porque los ánimos ya estaban lo suficientemente calientes entre estas dos personas que no darían su brazo a torcer…y casualmente paf…una programa de TV donde mostraron la realidad de una urgencia publica en una madrugada, cosa muy de moda en estos tiempos, pero no fue lo peor, fue como que el programa me lo dedicaran, ya que mostraron como se dejo morir a un pobre hombre donante. El señor llegó con un paro cardiaco, lo trataron de revivir y no hubo caso, solo lograron que quedara en estado vegetal y adivinen que, el medico llegó y lo desconectó, sin preguntarle a la familia. Salió este medico y fríamente dejo a esa viuda destrozada sola en la sala de espera, llorando sin consuelo, diciéndole….Hicimos todo lo posible. Mi mama solo me miro, fue como un “te lo dije”.
Es que acaso la necesidad de órganos ha llegado a ser tanta que se deja morir a las personas, que pasa con toda esa educación valorica que se les da a los médicos, de ética y tratos dignos para los pacientes, eutanasia sin consentimiento de los familiares. Esta es la mafia de los sistemas de salud en Chile, donde solo la gente con cheques en garantía y contactos en el medio puede tener una atención digna y de respeto.